Ubicación central, habitaciones amplias, limpieza estándar en todo el hotel

El ruido de la vida nocturna es inaceptable!!! Las paredes son tan delgadas que puedes escuchar todo, y la temperatura es difícil de controlar. La decoración está desgastada y necesita modernización, ¡no es lo que esperas en un hotel!!!

La ubicación está frente a una zona cultural.

Más divertido de lo que imaginaba

La ubicación perfecta para explorar la ciudad, en una calle tranquila, aunque el desayuno es algo limitado. El personal es atento, pero la conexión Wi-Fi puede ser variable. Sin embargo, las habitaciones son cómodas y amplias, lo que compensa algunos inconvenientes menores.

Ubicación excelente y habitaciones amplias

Lo que más me impresionó de mi estancia fue la ubicación, a solo unos pasos de la zona de museos y con acceso fácil al metro. La habitación era enorme, con una ducha y bañera separadas, y realmente se podía disfrutar de la paz por las noches. Un aspecto a mejorar sería la calidad del desayuno, que aunque tenía lo básico, podría ofrecer más variedad.

La habitación era enorme, con techos altos y una buena calefacción que se podía ajustar. Tenía un baño amplio y separaciones cómodas entre lavabo, ducha y bañera. Además, la limpieza fue impecable, y aunque el desayuno era básico, no afectó mi experiencia. Se agradeció tener una nevera en la habitación, perfecto para mantener bebidas frías. La verdad, dormí súper bien y no se escucharon ruidos por la noche.

La habitación era amplia y contaba con buena calefacción, lo que hizo mi estancia más cómoda. Sin embargo, el desayuno era bastante limitado y el servicio en recepción no fue el mejor, ya que el personal parecía desinteresado en ayudar. Es un lugar adecuado si buscas un sitio práctico y limpio para explorar la ciudad.

Estancia cómoda y tranquila en el corazón de Viena

Nuestra estancia fue muy positiva, el ambiente del lugar es acogedor y las habitaciones están bien equipadas. La ubicación es ideal para explorar la ciudad, con muchos museos cerca. Recomendamos aprovechar la calefacción excelente en días fríos y la limpieza impecable.

La ubicación es excelente, en el corazón de las atracciones de la ciudad. el personal es bastante amable y siempre dispuesto a ayudar. ofrecen servicio de lavandería, lo cual fue súper práctico.

Sin embargo, el desayuno podría ser más variado, ya que solo había una selección básica de frutas.

la ubicación es genial, justo atrás de la zona de museos, y la habitación triple era amplia y cómoda. me encantó la calefacción que se podía regular y la limpieza impecable.

faltaba aire acondicionado en la habitación.

La comida aquí es un viaje! El caldo que probé en el Glacis Beisl es un abrazo para el alma, y no te pierdas el Pedro's Meson, donde la tapa te deja con ganas de más. Además, la habitación era amplia y cómoda. no escuché ruidos del exterior, ¡una bendición en Viena!

El desayuno es un poco soso, y el café automático me dejó deseando más. Al llegar, había problemas con el aparcamiento reservado. un poco confuso, ¿no? A pesar de eso, la cama podría haber estado más cómoda.

la ubicación es brutal, cerca del metro y todo lo chido en la ciudad. las habitaciones bien limpias y cómodas, la recepción siempre al quite. el desayuno tiene lo básico pero el café está rico. el personal muy amable, siempre listos para ayudar. además, wifi gratis y rápido, lo cual es una buena señal.

El hotel ofrece una ubicación céntrica, ideal para visitar lugares de interés. Las habitaciones son limpias, aunque un poco pequeñas. El personal es amable y permite almacenamiento de equipaje. El desayuno tiene una selección adecuada, pero el café podría mejorar. Es una buena opción para viajeros que buscan comodidad.

Fue una buena elección para una salida de fin de semana en Viena con una muy buena relación calidad precio. La habitación tenía techos altos y buena calefacción, lo que hizo mi estancia más cómoda. Asegúrate de aprovechar la ubicación tranquila cerca del metro para explorar la ciudad fácilmente.

me encantó que tenía metro a 3 minutos. el club de enfrente es incómodo.